Estos pequeños escritos pretenden dar a conocer a artistas que habitan los márgenes, que circulan por donde preferimos no transitar, que realizan obras que no suelen ser para el gran público, pero que no dejan, por ello, de ser imprescindibles. El conocimiento no siempre recorre un camino llano y placentero. A veces, es necesario esforzarnos para subir las altas cumbres y poder ver el lejano horizonte.
Henri Chopin: un explorador del espacio interior.
1. La poética del balbuceo.
Con 20 años, en plena segunda guerra mundial y en la Francia ocupada, es requerido por el Servicio del Trabajo Obligatorio (STO) para “colaborar en el esfuerzo de guerra” y es enviado a la Alemania nazi para trabajar en fábricas y ferrocarriles. Chopin permanece escondido varios meses, hasta que en junio de 1943 es arrestado y conducido, primeramente al campo de concentración de Köningsbber (en la Prusia oriental), y luego al de Olomouc (en Checoslovaquia).
Allí, alegando ser poeta, se niega a trabajar y es encarcelado. En 1944 un bombardeo aliado destruye parte de un muro de la prisión y Henri huye, en pleno invierno, hacia el Este donde se encuentra con el ejército soviético. Al principio los soldados soviéticos piensan que es un espía y pretenden fusilarlo. Sin embargo, nuestro protagonista consigue aclarar su situación y pasa a trabajar en las cocinas de los oficiales rusos. Este mismo invierno es capturado de nuevo por las tropas nazis y es forzado a participar en las “marchas de la muerte”. Unas marchas que duraron cuatro meses y le llevaron, a pie, de la Prusia oriental a Lituania. A pesar de todas estas vicisitudes sobrevive y en junio de 1945, con 23 años, es repatriado a Francia. Al llegar a París le dan la triste noticia de que sus dos hermanos han muerto a manos de las tropas alemanas.
3. "El cuerpo es una fábrica de sonidos".
Según el propio relato del poeta francés en esas marchas se mezclaban distintos idiomas y dialectos de todos los rincones de Europa del Este, hasta fundirse en un magma lingüístico incomprensible, casi inhumano.
En todo este proceso, en toda esta cadena de acontecimientos, juega un papel principal el micrófono. Éste no es simplemente un medio de transmisión del sonido, sino que es una pequeña cápsula, una sonda de exploración de su propio cuerpo. Chopin, literalmente, se traga el micrófono que penetra por su boca invadiendo su espacio. El micrófono no hace distinciones entre sonidos poéticos y no poéticos. El micrófono no hace distinciones, ni establece jerarquías entre los sonidos. El micrófono aniquila toda diferencia.
El micrófono convierte todo lo que atrapa en materia
poética, en carne sónica.
4. Otras actividades.
Publicó diversos libros y discos con sus poemas: Le Dernier Roman du Monde (1971), Portrait des 9 (1975), The Cosmographical Lobster (1976), Poésie Sonore Internationale (1979),Les Riches Heures de l'Alfabeto (1992) y Graphpoemesmachine (2006), y también sus conocidosdactylopoèmes, trabajos gráficos hechos a partir de su máquina de escribir.
5. Y punto final.
Soy filólogo de formación, pero siempre he rebuscado en lo visual y en lo sonoro aquello que el texto no me llega a ofrecer. Para mí no hay jerarquía entre estos elementos, se mezclan, se arañan o se fusionan mejor o peor dependiendo del soporte. El soporte determina el contenido y el contenido busca el soporte adecuado.
Destripar los interiores del texto, del sonido y de las imágenes y volverlos a montar, como si de un monstruo de Frankenstein se tratara, es un divertimento al que no pienso renunciar.
Me considero un amateur y eso me libera de angustias y obligaciones y me permite fracasar y equivocarme más y mejor.
Si
os pica la curiosidad podéis visitar la web de AutismosAutomáticos que
coordino al alimón con Pepa Busqué.
1 Comentarios
Excelente
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