BRIZNAS SERÁN COGOLLOS, con Víctor LaGounda y Mónica Caldeiro

Qué somos o quiénes somos no importa realmente. Ni siquiera cómo somos nombrados. A veces somos La Patilla y La Visceralidad. Otras veces nos llaman Víctor López y Mónica Caldeiro. A menudo apelan a nosotros como Gounda y Campanilla de Cobre. Tenemos muchos nombres pero en apariencia somos dos y somos uno, prendiendo fuego a todos los caminos.
Nos gusta trabajar conjuntamente porque nos da alegría, amor y cogollos. Y gracias al empuje común hemos arrancado toda una serie de proyectos que hemos venido a compartir en los últimos meses con poetas individuales, colectivos, y personas físicas que nos escuchan, nos abrazan o nos quieren.
La Patilla y La Visceralidad es un dúo poético que integra poemas a dos voces con textos que cada uno de los poetas recita desde su propia voz. La Patilla y La Visceralidad nació como dúo tras unas cuantas noches de delirio poético, ebrio y amoroso. Un día a Víctor LaGounda se le ocurrió mezclar sus propios versos con los de Mónica Caldeiro y apareció un primer poema titulado “Esguinces y versos en collage”. Tras un par de apariciones con este poema a dúo, el público quiso más y más y ellos accedieron a las peticiones alegremente constituyéndose de manera sólida como la pareja poética más erótico-festiva y visceral de la ciudad condal. Desde entonces, se les ha visto en diferentes locales, garitos, lavabos y festivales de diversa índole en Barcelona y otras ciudades de la península. Próximamente llevarán sus lengüetazos poéticos a San Francisco, Nueva York y Calgary (Canadá).
Otro de los proyectos que nos llevamos entre manos es la creación de una editorial de audiolibros que ya hemos bautizado con el polémico nombre de Homicidas del LP. Desde esta editorial, las intenciones primordiales son impulsar la palabra hablada, la rapsodia, la poesía urbana y apoyar a todos aquellos poetas que utilizan su cuerpo y su voz como un instrumento de expresión sin limitarse al texto escrito o leído. Uno de los ejes centrales de la editorial será el de ofrecer un festival anual de Spoken Word y Jazz, o de cualquier forma poética y oral conectada con la música.
Por otro lado, está la Xarxa de Poesia Urbana de Barcelona, que cumple ya su primer año de existencia de la mano de Víctor LaGounda, impulsor de esta propuesta que ha funcionado gracias a su esfuerzo e ilusión, y que sigue funcionando con su empuje y con la participación de otros poetas que se van sumando a los recitales o a la organización. El propósito principal de la Xarxa de Poesia Urbana de Barcelona es básicamente llevar la poesía a todos los lugares posibles, lo que implica que detrás hay una organización de recitales que sale desde la misma Xarxa. Y como la Xarxa ama la poesía, a los poetas y quiere unión, apoya cualquier propuesta que pueda surgir desde cualquier otro colectivo o poeta individual. Este apoyo se hace habitualmente desde la página web, donde se anuncian mensualmente todas las actividades de poesía que se dan en la ciudad. Cualquier poeta o colectivo que quiera anunciar su actividad no tiene más que escribir al contacto para ver su evento publicado en Internet. 
 
Con todo esto y más, La Patilla y La Visceralidad se guardan algunas cosillas en la manga que se irán desvelando cuando sea oportuno, o en las siguientes páginas web donde vamos actualizando la información pertinente a los sucesos que acontecen en los mejores baños públicos de la ciudad: 
 
La Patilla y La Visceralidad: http://lapatillaylavisceralidad.wordpress.com
Blog de Víctor LaGounda: http://ciegosybufandas.wordpress.com
Blog de Mónica Caldeiro: http://monicacaldeiro.wordpress.com
Xarxa de Poesia Urbana de Barcelona: http://www.pubcn.org


BRIZNAS SERÁN COGOLLOS
o qué hacen Víctor LaGounda y Mónica Caldeiro cuando no están en la alcoba
unos sándwiches de jamón o algo… ¿no?





(MÓNICA CALDEIRO)

Desde los jardines de nuestras madres
Levantaré de mi jardín las cabezas de las muertas
para que sus ojos cóncavos vean
cómo se presupone que debemos ir escoltadas
que no debemos manejarnos solas por el mundo
hacer vida y amor libremente, decidir
para vivir sin miedo

Así digo lo que deseo
seguiré siendo una zorra
que arrastra su coño fértil
hacia los confines de la tierra,
una zorra lista y ágil
capaz de correr a tiempo
capaz de enfrentarme con mis dos pechos
por escudo contra el odio que trata
de delimitarme

soy la más zorra y con el megáfono a voces
me manifiesto por las calles
por los bosques que me vieron engancharme
a las ramas y a la vida

voy siempre totalmente desnuda
voy siempre alerta a desayunarme al chile
cualquier asalto
voy siempre en pértiga por la ciudad
engullendo el aire que sobrevuelo

soy tan zorra que sé cómo ubicarme
cuál es mi trabajo
y/ dalo por hecho
ahora
no tiene nada que ver
contigo

lo que me bulle dentro es la luna
lo que me bulle dentro es el amor
que siempre es gratuito
lo que me bulle dentro son las pestañas
que han visto tsunamis de lágrimas
lo que me bulle dentro es la violencia
que constantemente pesa
sobre nosotras

esto es una llamada
a la no-indiferencia

llámame indiferencia
y escupiré tiradas de versos
silénciame de esparadrapo y goma de mascar
y mi lengua penetrará el cinturón de castidad
comérciame las nalgas, el pecho,
el vientre orondo y fértil
y yo me daré a la comunidad
me hermanaré con todas las brujas
estableceré puentes y BESARÉ BESARÉ
BESARÉ BESARÉ BESARÉ mujeres
hasta saciarme de amor
mi mirada no lanzará flechas de juicio
mi mirada no las verá competidoras
mi mirada será nítida, transparente
pondrá sus ojos en corro
para esta lucha

para ellas
que tienen óleos en los pliegues de la piel
que abren su sexo como un manantial
que canalizan deidades, amaneceres de luna y estrellas
que son redondas/ que viven solas
que son madres/ que son matronas
que son nodrizas/ que nos ama(r)mantan
que nos abren el coño porque deberíamos
entrar en él/ deberíamos
entrar en él/ tú tienes que
entrar en él/ acepta la vuelta
tu regreso a ese paraíso del que tanto
has renegado

entremos en él
volvamos a la tierra al fuego interno
despreciad la violencia hacia vuestras hermanas
erradiquémosla de la vida
celebremos los jardines colgantes de las entrañas
post- parto

porque cada vez que des a luz un poema
un libro/ una canción/ un árbol
una arquitectura
tú hombre/ mírate
eres una madre también
entra en él/ de qué tienes miedo
entra en él/ denuncia el abuso
respeta a tus hermanas que te cuidan
respeta
y déjate recibir de vuelta

levantad el puño
levantadlo bien alto
que cruce las zarzas
que se abra en gruñido

mi rabia es mi lucha
y mi violencia es derrocar este orden
así/ así/ así/ así/ nos abracemos

respeta la vida
que la luna te guíe
que las lobas del lupanar
te amamanten
a ti, mujer/ a ti, hombre
a ti, humanidad
a ti/ a ti/ a ti/ a ti
que todavía reclamas y clamas
por tu infancia perdida




Historias del Cadalso
Así que hoy me ha superado hasta mi empeño
he llegado al borde del bloqueo
quieren declararme técnicamente inútil
quieren diagnosticarme,
aplicarme un nuevo sello de identidad

que deje de escribir
extraños métodos de descanso
tengo malas noticias, me ha superado
no he sido capaz
no he sido capaz
de mantenerme consciente
de espantar los monstruos
tienen múltiples formas
les encanta hablar
les encanta encender mechas en mi axila

no sigas con esta vida”
qué harás cuando tengas que vivir con deudas”
que harás si no trabajas”
qué harás cuando nadie pueda pagar tu entierro”
qué harás qué harás qué harás qué harás
qué harás qué harás qué harás qué harás”
¿cuándo vas a aprender a lidiar con ella?”
¿cuándo vas a llevar una vida normal?”

llevar una vida normal
es no poder tenderme en la arena
llevar una vida normal
es ver una vez al mes la montaña
llevar una vida normal
es apartar la intuición
como quien espanta las moscas de la mierda
llevar una vida normal
es desconocer los riesgos reales
llevar una vida normal
es conocerme voluntariamente esclava
llevar una vida normal
es anular mi naturaleza combativa

me declaro anormal
paranormal para este sistema
me declaro inútil
socialmente discapacitada

me declaro anormal
paranormal para este sistema
me declaro inútil
socialmente discapacitada

estoy en la sala de urgencias de un hospital
con mi miedo, débil, sola
vulnerable
y estoy escribiendo sobre

mi vida anormal necesaria
mi vida paranormal necesaria
mi excentricidad necesaria
mis poemas necesarios
mis tres mil libros necesarios
mi sexo de diosa necesario
todo ello necesario

me duele cada una de mis partículas
y si sobrevivo, es por amor
y si muero, es para renacer
para admitir mi anormalidad
mi todavía capacidad
de sorprenderme ante la belleza


una decisión
La ira es un bosque que anhela su propia tala
y sin embargo endeble e innecesario
su poder podría ser preciosamente abrumador
pero algo debilita esas gemas,
algo reblandece las joyas turquesinas y vibrantes
cuando se acercan peligrosamente
a la hoguera y la llama

si mi capacidad fuera ilimitada
podría rescatarlas, esas piedras preciosas
que reflejan un sol que por ajeno
infiere obscenidades
y hace falta talento, hace falta escritura
para sobrevivir
hace falta entereza, otros recorridos, otras maneras
para encontrar un aliento
aún no contaminado

podría fácilmente retomar la lucha
ponerme por bandera esta guerrera que he sido
hacer retumbar las lociones para pelo de muerto
con grasa de cocina
manifestar que descalza me entiendo mejor
y así dialogo con el mundo

no me permito de mi propia boca pronunciarme
con esas palabras que mueven montañas
-elijo con mi fuerza moverme a mí misma

no me permito dejarme caer por cascadas de piedras
rozar sus esquinas/ cubrirme
de magulladuras
golpearme y dislocarme los miembros
una vez más/ noche tras noche
hacer de mi vivencia algo no auténtico
sino dependiente de otros que generan
esa máquina desengrasada con los frenos sin pulsar
desinhibida máquina de matar
de matarme a mí misma

yo crecí para otros asuntos
estiré mis ramas para atrapar redondeces
observar la manifestación caleidoscópica del sufrimiento
humano o del mío propio
crecí para reblandecer las joyas
capaces de hacer de mis miembros extremidades pétreas
y qué otra manera sino de respirar
qué otra manera de buscar la superficie/ si no


sin la combustión suficiente
las heridas permanecen
mi decisión es
abrirlas para coserlas
coserlas con un dedal ardiendo
abrasado rojo y encendido
que nada llueva, que nada lo apague
que sortee todo barbecho
y que la ira fluya, fluya obstinada
con mi beso negro
en su dulce,
dulce y prestigioso/ ano
de fuego




(VÍCTOR LAGOUNDA)


las trampas del ego
he atravesado más de mil días de barra
y rostros informes
con ojeras en las piernas
hombre del saco-saco de losas ajenas
pantanos de estupefacción
los he atravesado
quemando mi alma
en el desapego y el cansancio
de no saber quién soy no saber
en qué silla en qué lugar en qué centro

he atravesado un millar de horas muertas
de obcecación y apatía
de poner latas en la nevera
de más leche en tu té
de más llamadas más encuestas
más repartos y más actos hartos
de infartos que no culminan como deberían
y que agazapados quedan antes de la plenitud

he pintado llagas en mis venas
he apuñalado mi cerebro con la histeria
he fumado y fumo-he absorbido litros-he cenado poco
he sido cínico
he inventado violencia
he juzgado demasiado
y las derrotas han sido severas pero útiles:
cada una de ellas es un poema

he caído en las trampas del ego
cuando todo se ha aprisionado en la mente;
he acusado al mundo de aburrimiento
cuando el aburrimiento estaba en mí;
he sentido que todo estaba en su lugar
pero el orden es un capricho del pensamiento

he caído en las trampas
y vuelvo y volveré a caer
y otra vez me arrancaré la piel a tiras
para tenderla sobre el papel
para cortar mis labios
para decir mis cortes
y marchitar los vicios de la soberbia;
he caído – yo – el hombre rojo
el que se jacta de honestidad y amor
el que se llena la boca con palabras
he caído tanto en la fatal arrogancia de oscurecer
mi luz

y por ello me he creído un héroe
un guerrero un loco un ansia
me he creído tantas cosas que no soy
como un necio
he sido el ridículo hermoso del que aprende y nace y muere
y nace y muere y nace para morir de nuevo

por ello he reservado las noches para arder
y demostrarme que soy
y no soy lo que pienso que soy;
he sido
bajo las estrellas
el opio que aposenta los sentidos,
una ventana de sangre una bestia una gruta un error
he sido un jardín de dedos pacientes
he sido el amor absoluto mecido en el luto
de cada muerte de cama bajo tus muslos
y en ascensión he estallado
y he deseado
con acto y garra
más fuerte
otra vez trampa
otra vez muerte

he caído y la dentellada ha sido
la cura de humildad más brutal

nunca creas que eres quien creías ser,
las profundidades son demasiadas
para dar margen a lo incontestable



poemas de amor al dolor y al miedo
¿Qué puedo hacer
sino cantar
para calmar
mi pena?”
(William Carlos Williams)
escribo
poemas de amor al dolor
al miedo
entre flores amarillas
y cactus guillotinados
escarbo en la tierra
y pregunto a las gordas abejas
cómo hacen ellas
que no tienen dedos
para escribir

quién puede sostener el dolor del mundo
y de los demás –
yo apenas puedo con el mío;
quién puede sostener el peso de las olas
los gatos heridos
los ruidos ajenos
quién puede sostener el miedo –
yo apenas puedo compartir el mío
con los que amo

escribo
poemas de amor al dolor
al miedo
porque no tengo otra misión
que la alegría
no otra que cantar
agarrar las puntas de mi delantal
e inventar un baile que tenía que ser
para patear el ritmo
de las cosas

tengo una estantería nueva
un escritorio nuevo
una cama nueva
donde hilvanamos con cuidado
el amor
tengo dos luces nuevas
somos mi amante y yo
frente a frente – despojados
ojos en verso
polvo entre los libros

escribo
poemas de amor al dolor
al miedo
así a la ira así al olvido al asco
y en ellos
la tristeza es magnánima
inmensa calurosa

yo no puedo sostener el dolor y el miedo
del mundo
y de los demás
apenas poner las manos sobre tu espalda
y sentir que la alegría
cabalga hacia cualquier horizonte
apenas sentir las calles los párpados las flores
y confiar

escribo
poemas de amor al dolor
al miedo
porque sinfines de descensos
de derrotas
nos esperan
y tras ellos
la nítida selva
de lo inequívoco
el trance final
que a veces tocamos


reverdecer y explotar de penumbra
mi aposento
es el vacío
del atardecer
cuando la lluvia
borra todos los nombres

cuando la paranoia se asienta
en el cuero
para la extracción
de luz

cuando los estados ascienden
con la brutalidad de los himnos
para expirar
en la melodía justa
que todo lo embellece

y al final de las sábanas:
reverdecer y
explotar de penumbra.

acomodo la controversia
entre la tierra y el cielo
la busco
me absorbe
me arrastra a un cerco de calma
y derramo
los atisbos y las puertas
ante la amenaza de ser
torso cementerio ardiendo
plumas de hoja seca
Atlas de espalda ligera

descenderé
lo suficiente y más
y en esta cripta de almas
sangrarán mis oídos
por toda la soberbia
que ha teñido el mar
de oscuridad;

reverdeceré y
explotaré de penumbra
palparé los hondos techos
entre la madurez y el delirio
pereceré de noche
y al final de las sábanas:
abriré el ombligo
ahora abrir el ombligo
ahora no decir la alegría
no suponer la tristeza
ahora desandar toda la arena
lo que jamás fui
y me dejé creer
dejarlo marchar
ahora

cuidaré mi jardín.

aunque no sepas cómo
regala una flor a tus madres
aunque no sepas
planta algo delicado
en tu pecho
reverdece y explota de penumbra
en mi aposento – mi vacío
aunque no sepa
dormiré despojado
como si así
así
fuera suficiente



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2 Comentarios

  1. Por poemas menos incendiarios que estos dicen que Judas se colgó de un árbol hace como 2 mil años.

    SL

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  2. ¡Pero qué fuerza adquieren estos poemas cuando los lee Mónica! No es lo mismo leerlos que escucharlos y "sentirlos" en sus movimientos, cuando se entrega en cuerpo y alma a las palabras.

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